La nueva vocera de Biden promete “decir la verdad, por difícil que sea”

Jen Psaki promete “decir la verdad, por difícil que sea”

La secretaria de Prensa y vocera del presidente Joe Biden, Jen Psaki, afirmó este miércoles por la noche que buscará tener una buena relación con la prensa “aunque habrá días en los que habrá desacuerdos”, en un contacto con la prensa en la que repasó las primeras medidas del flamante presidente Joe Biden.

“Tengo un gran respeto por el papel del periodismo. Habrá días en los que no estaremos de acuerdo. Pero yo quiero compartir información exacta. Biden diría que él trabaja para el pueblo estadounidense. Y yo también”, remarcó Psaki.

En la misma línea, insistió en que buscará con la prensa “compartir la verdad, aunque sea difícil de escucharla”. “Espero lograr eso”, señaló.

Psaki mantuvo su primer contacto con la prensa “en este día muy activo”, dijo, para repasar las primeras medidas adoptadas por el presidente Biden.

Además de prácticamente nombrar cada una de las decisiones que Biden dispuso por decreto, la funcionaria contó que el el primer contacto del jefe de la Casa Blanca con un líder extranjero será el próximo viernes, cuando llame al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, “por la importancia de la relación” con el país vecino.

Dijo no saber, en cambio, si habrá algún contacto con el presidente ruso, Vladimir Putin, pero estimó que “las primeras comunicaciones serán con socios y aliados, en busca de reconstruir relaciones”.

Experta en comunicación política, Psaki, que ya ocupó ese cargo en el final del mandato del también demócrata Barack Obama, entre 2015 y 2017, hizo una enumeración de las principales medidas que adoptó hoy Biden, empezando por la obligatoriedad del uso de barbijos en transporte y dependencias federales.

Destacó también la revocatoria a la retirada de EEUU de la OMS y reveló que mañana mismo, “sin perder tiempo”, el país ya estará representado en una reunión del organismo, y resaltó la moratoria federal contra los desalojos hasta fines de marzo y el pedido al Departamento de Educación para congelar los préstamos estudiantiles federales hasta el 30 de septiembre.

Enumeró también el freno a la construcción del muro en la frontera con México y la posibilidad de que vuelvan a entrar al país ciudadanos de origen musulmán, junto al plan de “modernización del sistema de migración”.