En
un
operativo
de
alto
impacto
que
marcó
el
final
de
seis
meses
de
investigación,
la
Fuerza
Policial
Antinarcotráfico
(FPA)
desarticuló
una
organización
dedicada
a
la
venta
de
drogas
que
operaba
en
la
ciudad
de
Córdoba,
Villa
del
Totoral
y
Cañada
de
Luque.
El
procedimiento,
ordenado
por
el
Ministerio
Público
Fiscal,
incluyó
12
allanamientos
simultáneos
y
finalizó
con
12
personas
detenidas,
entre
ellas
cuatro
mujeres
y
ocho
hombres.
Los
allanamientos
se
realizaron
en
cinco
viviendas
de
barrio
Guiñazú,
cuatro
domicilios
en
Villa
del
Totoral
y
tres
en
Cañada
de
Luque,
donde
se
clausuraron
nueve
puntos
de
venta
de
estupefacientes.
De
acuerdo
a
lo
informado
oficialmente,
los
lugares
allanados
funcionaban
como
centros
activos
de
distribución
de
drogas,
en
algunos
casos
con
presencia
permanente
de
“satélites”
que
vigilaban
la
zona
de
día
y
de
noche.
Entre
los
elementos
incautados,
se
contabilizaron
2.474
dosis
de
cocaína,
445
de
marihuana,
dos
armas
de
fuego,
más
de
170
cartuchos
de
distintos
calibres,
cinco
vehículos
(dos
autos
y
tres
motos),
4.079.850
pesos,
3.900
dólares
y
otras
divisas
extranjeras.
También
se
decomisó
material
utilizado
para
fraccionar
y
empaquetar
la
droga.
Una
de
las
particularidades
que
más
llamó
la
atención
de
los
investigadores
fue
que
uno
de
los
puntos
de
venta
en
Córdoba
funcionaba
disfrazado
de
merendero
comunitario,
lo
que
permitió
a
la
organización
camuflar
sus
actividades
ilícitas
y
operar
con
relativa
impunidad.
Todos
los
detenidos
fueron
puestos
a
disposición
de
la
Fiscalía
de
Lucha
contra
el
Narcotráfico
de
Jesús
María
y
quedaron
imputados
por
violación
a
la
Ley
Nacional
de
Estupefacientes
N°
23.737.
Algunos
de
los
integrantes
ya
contaban
con
antecedentes
por
robo
y
causas
vinculadas
al
narcotráfico.
Desde
la
FPA
destacaron
que
la
estructura
desbaratada
tenía
un
nivel
de
organización
avanzado
y
que
su
caída
representa
un
golpe
importante
al
circuito
de
narcomenudeo
del
centro
y
norte
provincial.