Biden quiere todas las empresas se aseguren de que sus empleados estén vacunados o se sometan a pruebas semanales
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este domingo un plan que obliga a la vacunación contra la Covid-19 de los empelados del Estado, los trabajadores de las grandes empresas y el personal sanitario, así como la baja en los costos de las pruebas, y cuestionó a “una clara minoría” de ciudadanos que “socava la salud pública”.
“Aunque Estados Unidos está en mucho mejor forma que hace siete meses, cuando asumí el cargo, tengo que decirles un segundo hecho: estamos en un tramo difícil y podría durar un tiempo”, remarcó Biden.
En un discurso que dio esta tarde en la Casa Blanca, el mandatario dijo que su gestión fue “paciente” con quienes rechazan la vacunación, “pero la paciencia se está agotando”.
Biden lanzó un plan para vacunar a estatales y cuestionó a quienes rechazan la inmunización
“Una minoría de estadounidenses apoyados por una minoría de funcionarios de cargos electos, impide dar vuelta la página””
Joe Biden
Para Biden, los estadounidenses que se vacunaron están cada vez más “frustrados” con los 80 millones de personas que no se inmunizaron, aunque reconoció que las nuevas medidas no supondrán una solución rápida.
Según la Casa Blanca, los nuevos requisitos podrían aplicarse hasta a 100 millones de estadounidenses, y constituyen el mayor impulso de Biden hasta ahora para exigir vacunas a gran parte del país.
“Mi mensaje a los estadounidenses no vacunados es este: ¿Qué más hay que esperar? ¿Qué más necesitan ver? Hemos hecho que las vacunas sean gratuitas, seguras y convenientes”, dijo el jefe de la Casa Blanca.
Se comenzarán a vender kits de pruebas rápidas caseras al costo durante los próximos tres meses
“Escuchen las voces de los estadounidenses no vacunados que yacen en las camas de los hospitales, dando su último aliento, diciendo ‘si solo me hubiera vacunado’. Si solo. Es una tragedia. Por favor, no dejen que se convierta en la suya”, insistió, según el sitio de la cadena CNN.
Biden anunció que ordenó al Departamento de Trabajo que exija a todas las empresas con 100 o más empleados que se aseguren de que sus empleados estén vacunados o se someten a pruebas una vez a la semana, bajo el riesgo de ser multadas en miles de dólares si no cumplen.
Reveló también planes para bajar el costo de las pruebas de Covid-19 para los estadounidenses, incluyendo una colaboración con los vendedores minoristas para hacer que los kits caseros estén disponibles “al costo”.
“Con el fin de detectar y controlar mejor la variante delta, tomaré medidas para que las pruebas estén más disponibles, sean más costeables y cómodas”, dijo Biden.
Explicó que usará la Ley de Producción de Defensa “para aumentar la producción de pruebas rápidas, incluyendo aquellas que se pueden hacer en casa”.
“Mientras se incrementa la producción, mi administración ha colaborado con los principales minoristas como Walmart, Amazon y Kroger y esta noche anunciamos que, a más tardar la próxima semana, cada uno de estos puntos de venta comenzará a vender kits de pruebas rápidas caseras al costo durante los próximos tres meses”, expresó.
Según Biden, “esta reducción inmediata en los precios de los kits de pruebas caseras supone una reducción en costos de hasta el 35%”.
The pandemic of the unvaccinated is a tragedy that is preventable. People are dying and will die from COVID-19 who don’t have to.
If you haven’t gotten vaccinated, do it now. It could save your life and the lives of those you love.
— Joe Biden (@JoeBiden) September 8, 2021
Detalló además que el Gobierno extenderá la aplicación de pruebas gratuitas en 10.000 farmacias en todo el país y destinará 2.000 millones de dólares a la compra de casi 300 millones de pruebas rápidas para su distribución en centros de salud comunitarios, bancos de alimentos y escuelas, de modo que “todos los estadounidenses, independientemente de sus ingresos, puedan tener acceso a pruebas gratuitas y convenientes”.
Después volvió a la carga contra la “clara minoría de estadounidenses apoyados por una clara minoría de funcionarios de cargos electos, que impide dar vuelta la página” de la pandemia.
“Los no vacunados abarrotan nuestros hospitales, están saturando las salas de urgencias y las unidades de cuidados intensivos, y no dejan espacio para alguien con un ataque al corazón o una pancreatitis o un cáncer”, advirtió.
Según el demócrata, vacunarse o negarse a hacerlo “no se trata de libertad, ni de elección personal, sino de protegernos a nosotros mismos y a los que nos rodean, a la gente con la que trabajamos, a la gente que nos importa y a la gente que queremos”.
Señaló que muchas grandes empresas e incluso Fox News, muy crítica con su administración, ya habían anunciado medidas similares.
“La conclusión es que: vamos a proteger a los trabajadores vacunados de los compañeros no vacunados. Vamos a reducir la propagación de la Covid-19 aumentando la proporción de la fuerza de trabajo que está vacunada en las empresas de todo Estados Unidos”, dijo.
La agencia ANSA mencionó la existencia de rumores que dan cuenta de una supuesta intención de Biden de promover una cumbre internacional sobre Covid y vacunación durante la próxima asamblea general de la ONU, que reúne este mes a decenas de mandatarios y jefes de Estado en Nueva York.