Estados Unidos, el país con más contagios y muertes por coronavirus, volvió a estar en el centro de la escena por un informe privado que sugiere que la cantidad de decesos puede ser mayor que la reportada oficialmente y por las repercusiones de su ruptura con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En tanto en Brasil -el segundo país más afectado por el virus- se profundizó la ya delicada crisis política, en Perú hubo un nuevo récord de contagios y en Paraguay se encendieron luces de alarma por el aumento de casos sin nexos con anteriores infectados.
Un estudio de la Universidad de Yale, publicado hoy por The Washington Post, puso en duda que Estados Unidos haya superado hace tres días la barrera de los 100.000 fallecidos por coronavirus y sugirió que eso pudo haber ocurrido a principios de este mes.
Sólo entre el 1 de marzo y el 9 de mayo hubo en ese país 101.600 muertos más que el promedio para ese período en años anteriores, lo que supone unas 26.000 defunciones más que las reportadas oficialmente por coronavirus en ese lapso, según el trabajo.
La cuestión de las estadísticas no es menor en un país que, además de ser el más castigado por el virus, vive desde el comienzo de la pandemia un enfrentamiento entre el gobierno federal, renuente a tomar medidas preventivas extremas, y la mayoría de las administraciones regionales, que decretaron cuarentena.
A diferencia de la absoluta mayoría de los países, Estados Unidos no publica estadísticas consolidadas de contagios y muertes en todo el país, por lo que la principal usina de información sobre la pandemia fuera de la OMS, la universidad Johns Hopkins, suma los datos reportados por los gobiernos regionales.
Además, la previsión de decesos por Covid-19 osciló entre los 50.000 a 60.000 que pronosticó el presidente Donald Trump y los 100.000 a 240.000 que llegó a vaticinar el principal epidemiólogo del país y asesor de la Casa Blanca, Anthony Fauci.
Las estadísticas y las expectativas de casos y muertes por coronavirus son cruciales en un país donde cada vez más actores reclaman la reanudación de las actividades económicas después de que más de 38 millones de personas pidieran el subsidio por desempleo en los últimos dos meses y medio, y el Congreso, que aprobó un paquete de ayuda fiscal por 2,2 billones de dólares, pronosticara una contracción de la economía de 11% para el segundo trimestre de este año.
Por otra parte, la decisión de Trump de romper con la OMS originó una batería de réplicas con Rusia y la Unión Europea (UE) a la cabeza, que acusaron a Washington de dar “un golpe” y debilitar la cooperación sanitaria global en plena pandemia.
“En estos momentos, cuando el mundo necesita consolidar esfuerzos en la lucha contra la pandemia, Washington propina un golpe a los cimientos de la interacción legal en la esfera de la sanidad”, criticó la vocera de la cancillería rusa, Maria Zajarova.
En tanto, las autoridades de la UE pidieron a Trump que “reconsidere” su decisión ya que la cooperación global es “la única vía efectiva y viable para ganar la batalla” contra la pandemia, según un comunicado firmado por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el alto representante para la política exterior, Josep Borrell.
En Brasil, donde también el gobierno central se niega a adoptar medidas preventivas que de todos modos adoptaron los gobernadores, el presidente Jair Bolsonaro, dijo que “todo apunta hacia una crisis”, en relación con decisiones fiscales y judiciales vinculadas con investigaciones a él y parientes y colaboradores cercanos.
El presidente de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, le respondió que los demás poderes de la república “no deben servir solamente para decir sí al gobierno” y sostuvo que cada vez que el jefe del Estado tiene un conflicto, “desorganiza y genera inseguridad”.
En Perú, el gobierno reportó hoy dos récords diarios: 7.386 contagios de coronavirus, que llevaron el total a más de 155.000 e hicieron escalar al país al undécimo puesto entre los que tienen más casos, y 48.000 pruebas, una cantidad similar a la realizada en todo el primer mes de la pandemia y el cuádruple de la meta inicial de las autoridades.
En Paraguay, uno de los países menos afectados por el virus, el gobierno se manifestó preocupado por el aumento de contagios sin nexos con anteriores infectados, por lo que intensificó controles viales en Asunción y Ciudad del Este, las dos mayores urbes, y advirtió que no descarta retrotraer la salida gradual de la cuarentena, con la que esperaba reanudar 83% de la actividad económica en la presente etapa.
Mientras tanto, en Asia algunos países, como Irán, que al principio de la pandemia sufrió altos costos en vidas humanas aunque luego logró contener el virus y acumulaba 7.734 fallecidos, anunció hoy la reapertura de sus mezquitas, amplió el horario comercial y reanudó el trabajo en sus oficinas públicas como parte de la eliminación gradual de restricciones por la pandemia.
Esta semana abrieron museos, centros culturales y mausoleos, y desde hoy, que es el principio de la semana laboral, ya todos los empleados del gobierno se presentaron en sus puestos de trabajo cuando hasta ahora sólo dos tercios comparecían físicamente.
Rusia, en cambio, quedó a punto de alcanzar los 400.000 casos de coronavirus con un incremento diario entre 8.000 y 9.000 nuevos pacientes desde hace una semana y una tendencia cada vez más clara a la reducción de los índices de transmisión.
Asimismo, India extendió hoy hasta el 30 de junio la cuarentena para las principales ciudades del país al tiempo que anunció una reactivación económica para las zonas menos afectadas por la pandemia, horas después de registrar un nuevo récord diario de infectados y muertos por Coronavirus.