“Se multiplican los escenarios posibles”

0
66

Hay una imagen prototípica de los conciertos de jazz de las grandes figuras del género: clubes atestados de gente, el humo del tabaco flotando en el aire, las copas con bebidas espirituosas que van y vienen y la energía especial que se produce cuando los artistas consiguen 

la atención privilegiada de un público entregado a la ceremonia. Esas condiciones son imposibles de reproducir hoy, con el marco limitante de las severas restricciones que impuso la pandemia del coronavirus. Adrián Iaies lo sabe de sobra, pero no por eso abandona la idea de tocar. Este sábado a las 22 habrá entonces un live stream del Adrián Iaies Drumless Trío, una formación que él encabeza (está a cargo del piano, la composición y los arreglos del repertorio) y en la que lo acompañan Santiago Lamisovski (contrabajo) y Rodrigo Agudelo  (guitarra). Las entradas para el concierto, que se emitirá para toda Iberoamérica en calidad de video Full HD y con salida de audio profesional desde los Estudios Dr. F de Saavedra, se consiguen en Tickethoy.com. 

“Nos falta la objetividad que da la perpectiva, el paso del tiempo necesario para entender lo que estamos viviendo”, asegura el experimentado músico. Y sigue: “Es una etapa que para mí tiene similitudes con la de la Revolución Industrial. En aquellos años hubo un montón de oficios que desaparecieron. Y yo creo que después de esta pandemia hay unas cuantas cosas que muy probablemente van a desaparecer. Además, esta es la primera de una serie de pandemias, me parece. No es algo que pasó porque alguien apretó mal un botón, sino más bien una consecuencia de un mundo tan interconectado. Para los músicos es muy difícil… Hay cosas buenas, ojo: por un lado se multiplican los escenarios posibles, si se ajustan bien las cuestiones técnicas. Yo podría hacer un concierto desde mi casa, donde tengo el piano con el que toco a diario y que es mejor que cualquiera de los que puedo encontrar en un club de Buenos Aires. También es cierto que la audiencia posible ya no es solo la de la ciudad en la que vivís. Tenés la oportunidad de expandirla en todo el mundo. Pero eso también tiene una contra: yo hago un concierto desde casa y estoy compitiendo con Brad Mehldau, que toca por streaming a la misma hora que yo, por poner un ejemplo al azar. Es decir, empiezo a competir ya no con lo que pasa en clubes de mi ciudad, sino con lo que programa el Village Vanguard”.

La nueva exigencia que se plantea, razona Iaies, es estar a la altura de esa competencia de alto nivel. “Hay que ocuparse de presentar algo muy bueno y que sea original, hay que dominar el inglés para poder comunicarse con un público potencial que no sea de Argentina y hay que buscarle la vuelta para que la gente lo vea como un programa. Yo, de hecho, voy a tocar con un piano de media cola Yamaha, que es probablemente el mejor que hay en un estudio de Buenos Aires y que es imposible encontrar en un club. Es el piano con el que grabé mis diez últimos discos. 

El técnico y el ambiente del estudio donde vamos a hacer el show son gloriosos. Es una manera de aprovechar una situación nueva que estamos obligados a transitar”.