Encargados de la sanidad de Brasil ingresaron al campo de juego cuando se jugaban los primeros minutos del clásico con Argentina para pedir que el partido se detenga por la participación de jugadores de nuestra selección a los que el Gobierno del vecino país quería deportar por la situación de la pandemia.
En la previa, se planteó desde el Gobierno de Brasil que cuatro jugadores de la selección argentina no podían ingresar al país por la situación sanitaria. Se trata de Lo Celso, Martínez, Buen Día y Romero sobre quienes se pidió la deportación.
Asimismo, el partido comenzó y cuando iban pocos minutos de juego, ingresaron a la cancha personas del área sanitaria del Estado brasileño a pedir que se detenga el encuentro.
El planteo del Gobierno se basa en reglamentación sobre restricciones que se disponen para los viajeros que llegan desde el Inglaterra. En ese caso, se obliga a quienes ingresen desde ese país a una cuarentena estricta de 15 días. Y desde el Gobierno brasileño se expresó que los cuatro jugadores de la selección argentina no habían declarado haber viajado desde Gran Bretaña para integrar el equipo.