Vladimir Putin confirmó que su intención es sacar al gobierno de Ucrania y hasta llamó al ejército ucraniano a hacer un golpe de Estado. “Será más fácil que nos pongamos de acuerdo si toman el poder”, recomendó.
En este sentido, en un comunicado oficial, definió al gobierno ucraniano como “una banda de drogadictos y neonazis” y planteó que sus tropas combaten a “terroristas”.
El presidente ruso mantuvo una comunicación telefónica con su par de China, Xi Jinping, quien lo apoyó pero le recomendó resolver el conflicto a través de negociaciones diplomáticas.
“China sostiene que la mentalidad de Guerra Fría debe ser abandonada por completo y debe establecerse finalmente un mecanismo de seguridad europeo equilibrado, efectivo y sostenible a través del diálogo y de la negociación”, le planteó el mandatario chino.