El número de migrantes que murieron ahogados frente a las costas de Siria por el naufragio de su embarcación procedente de Líbano subió a 94, informó este sábado la agencia oficial de noticias siria.
Un balance anterior brindado el viernes indicó que habían fallecido 73 migrantes que intentaban llegar a algún país de la Unión Europea (UE) de manera irregular.
Según las autoridades sirias, unas 150 personas, principalmente libaneses y refugiados sirios y palestinos, iban a bordo de la pequeña embarcación que se hundió el jueves frente a la ciudad portuaria de Tartús, en el oeste de Siria.
“El número de personas fallecidas en el naufragio se ha elevado a 86”, declaró hoy Samer Kbrasli, director general de los puertos sirios, a la agencia de noticias Saná, y explicó que 20 migrantes habían sido rescatados.
Entre los náufragos había diez niños, informó el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Se trata el naufragio más letal de los últimos años en Siria, un país asolado por más de once años de conflicto, consignó la agencia de noticias AFP.
De su lado, Líbano vive a su vez una de las peores crisis económicas mundiales desde 1850, según el Banco Mundial.
Muchos de los pasajeros libaneses del barco proceden de zonas pobres del norte del país, incluida Trípoli, una ciudad que se convirtió en un centro de inmigración irregular hacia el Mediterráneo, sobre todo de refugiados sirios, pero también cada vez más de libaneses.