Ellos son el ex Patronato Facundo Altamirano, clave en la Copa Argentina, y el experimentado colombiano Carlos “la Roca” Sánchez.
Las buenas noticias llegaron todas juntas para Ruben Darío Insua. Fue un martes cargado de novedades en el libro de pases de San Lorenzo, que cerró al arquero Facundo Altamirano a préstamo y tiene muy encaminada la llegada del volante colombiano Carlos Sánchez, como jugador libre. Además, espera que hoy firme su contrato Rafael Pérez, tras pulir una diferencia económica.
La negociación con Altamirano, que se lució el año pasado en el arco de Patronato, llevó varios días. Su pase pertenece a Banfield, club que lo había cedido al club de Paraná. Ahora, el Taladro volvió a darlo a préstamo, esta vez al cuadro de Boedo. El arquero llega por un año con un cargo de 200 mil dólares que se descontará de la opción de compra de 1,6 millones, si es que San Lorenzo decide ejecutarla en diciembre.
Este arquero de 26 años competirá con Augusto Batalla, quien arrancará como titular en la consideración de Insua. El que tendrá que buscarse nuevo destino es José Devecchi, que pretende continuidad y con la llegada de Altamirano quedará muy tapado.
A su vez, el Gallego tendrá pronto a la Roca Sánchez, el volante cafetero de 37 años que quedó libre de Independiente Santa Fe de Bogotá y que está terminando de cerrar su contrato con el equipo azulgrana. Una de las cuestiones a terminar de definir es si su vínculo finalmente será por uno o dos años. De este modo, el entrenador suma experiencia en el medio tras el retiro de Néstor Ortigoza y la partida de Juan Ignacio Méndez.
El que debía presentarse hoy a la revisión médica y no fue es otro colombiano, Rafael Pérez, por quien el Ciclón le pagará 700 mil dólares a Talleres por la totalidad del pase. Según supo Clarín, surgieron diferencias económicas con el defensor central, pero en la dirigencia aseguran que lo resolverán y que Rafa Pérez sellará su incorporación para luego viajar a Uruguay a sumarse al plantel.
El que ya está allá es Nicolás Blandi. El delantero renovó por una temporada más, por productividad.