Tropas israelíes destruyeron el domingo una escuela primaria en un pueblo del sur de Cisjordania esgrimiendo motivos de seguridad, lo que provocó duras críticas de la Unión Europea que había financiado la construcción del establecimiento educativo.
La representación de la UE ante los palestinos, que financió la estructura, declaró su “consternación” e instó a Israel a “respetar el derecho de los niños a la educación”.
Según corresponsales de la AFP, las topadoras intervinieron al amanecer para destruir esta pequeña escuela primaria situada en Jabet Ad Dhib, en la región de Belén, después de que expirara un ultimátum judicial de dos meses para evacuarla.
En el momento en el que las excavadoras avanzaron hubo una reacción de grupos de palestinos, que tiraron piedras, y las fuerzas israelíes respondieron con gases lacrimógenos.
La modesta estructura -una de las dos escuelas del pueblo según un responsable municipal- estaba vacía y el material había sido recogido.
Before and after – the EU-funded Palestinian school in Jubbet Ad Dhib in the West Bank demolished by Israel this morning.
This is Israel’s reciprocation after top EU officials’ overtures and wooing of Israel’s new hardline government in the last days >> pic.twitter.com/NoBSisc9DQ
— Martin Konečný (@MartinKonecny) May 7, 2023
La escuela, que acoge a 45 niños y niñas, ya había sido destruida en 2019 y reconstruida, destacó Ahmed Naser, un funcionario del Ministerio de Educación palestino contactado por la AFP.
El Cogat, órgano del ministerio de Defensa israelí que supervisa las actividades civiles en los territorios palestinos, impuso en marzo un plazo de dos meses para desalojar la escuela, tras una orden de un tribunal de Jerusalén.
Según esta entidad, la estructura había sido “construida ilegalmente, sin permiso”.
Añadió que constituía “un peligro para sus ocupantes”, basándose en la opinión de un ingeniero sobre el riesgo de derrumbe del edificio.