Un automóvil quedó prácticamente en el aire en la zona de la costanera y alarmó a los transeúntes.
Fue un árbol el que frenó la marcha del vehículo que atravesó la calle y la vereda y quedó a punto de caer al lago San Roque.
Según trascendió, sus dueños estaban en la zona y el auto se desplazó solo, al parecer porque quedó sin marcha y sin freno de mano.