La música es una de las manifestaciones artísticas más profundas y universalmente apreciadas de la humanidad. Desde las melodías tribales de las culturas ancestrales hasta las complejas composiciones sinfónicas de la actualidad, la música ha sido una constante en la vida de las personas, influyendo no solo en sus estados de ánimo, sino también en sus procesos creativos y la generación de ideas.
Esta extraordinaria capacidad de evocar una amplia gama de emociones en quienes la escuchan me impulsó a proponer La música de las ideas, un concierto de piano diferente.
La música tiene el poder de desencadenar recuerdos vívidos y emociones. Esto se debe en parte a cómo el cerebro almacena la información musical. Las canciones, por ejemplo, a menudo se asocian con momentos y eventos específicos en nuestras vidas, y escuchar una canción familiar puede evocar recuerdos y sentimientos asociados.
Cuando hace unos años creé el espectáculo de música clásica para niños La vuelta al mundo en un violín, en donde una orquesta maravillosa hacía un viaje musical que fascinaba a quienes la escuchaban, sin querer estaba sembrando la semilla que me llevaría a seguir explorando la idea de llevar el arte musical a todos.
Este espectáculo con piano solo es una versión minimalista de esa idea original. Y lo que falta en grandiosidad o variedades tímbricas, se compensa ampliamente con la intimidad, la complicidad y la interacción con el público. Siendo un fan de Les Luthiers de toda la vida, no puedo negar que han influido sobremanera en mi forma de estar en el escenario, en donde trato de que haya mucho humor.
Y si le sumamos anécdotas y relaciones directas entre lo que oímos y nuestro quehacer cotidiano, el combo (me) cierra.
Mariano Sigman opina que “todos somos científicos” porque un niño pequeño siempre es curioso y está interesado en saber cómo funcionan las cosas. Parafraseando, podemos expresar que “todos somos músicos”. Prácticamente todos los niños pequeños cantan, aplauden, etc.
La música de las ideas en cierta manera busca rescatar esa parte artística que todos tenemos y que algunos tuvimos la suerte de que se transforme en nuestra profesión.
El espectáculo en vivo es el punto culminante de la música, donde todo cobra vida frente a una audiencia. Y no existe grabación o video que se equipare a la experiencia en persona
La música de las ideas es una experiencia única que va más allá de la simple escucha. Es involucrarse desde los sentidos y el humor de manera profunda.
El entretenimiento continúa evolucionando con la tecnología y la cultura en constante cambio. La revolución digital, la fusión de géneros y el impacto de las redes sociales han transformado la forma en que consumimos música y experimentamos el espectáculo en vivo.
Pero en última instancia, la música y el espectáculo son testigos y participan en la evolución constante de nuestras ideas y emociones. Son un reflejo de la humanidad y una fuente continua de inspiración y placer. La magia del arte de los sonidos radica en su capacidad para conectarnos a nivel emocional, inspirarnos y unirnos como comunidad a través de la celebración de la creatividad humana.
Y esto, al fin y al cabo, no cambió tanto.
*Músico argentino.