En
medio
de
un
cruce
de
versiones
que
van
y
vienen
sobre
lo
que
se
describe
como
un
escándalo
financiero
que
afecta
a
muchos
comerciantes
y
vecinos
de
Carlos
Paz,
el
empresario
Ariel
Tondo
salió
a
dar
explicaciones
sobre
lo
que
sucede
con
sus
cuentas,
sus
restaurantes
y
ventas
de
joyas,
automotores
y
motos.
En
una
entrevista
exclusiva
que
concedió
a
Carlos
Paz
Vivo!,
atribuyó
la
crisis
que
atraviesan
sus
comercios
y
el
corte
en
la
cadena
de
pago
con
sus
proveedores
a
un
estafa
de
la
que
dice
haber
sido
víctima.
Y
apuntó
directamente
contra
una
persona:
Jorge
Saieg,
un
conocido
prestamista
de
la
ciudad,
con
antecedentes
judiciales
de
relevancia
en
la
década
de
1990.
Tondo
afirmó
que
esta
mañana
presentó
una
denuncia
ante
la
Fiscalía
de
Delitos
Complejos
de
Córdoba
que
deberá
determinar
si
fue
víctima
de
un
delito.
Además,
aseguró
que
hará
frente
a
los
pagos
y
acreencias
que
tiene
que
afrontar.
-¿Qué
es
lo
que
está
pasando
con
tus
negocios?
-Yo
soy
un
empresario
de
hace
más
de
35
años
en
Villa
Carlos
Paz
que
me
dediqué
a
determinados
rubros.
En
principio,
estuve
con
la
fábrica
de
joyería
desde
año
83
al
2013
en
una
sociedad
con
mi
hermano.
Después
esa
sociedad
se
disolvió
y
yo
empecé
a
tener
mis
emprendimientos
comerciales
en
familiar
con
mis
hijos
y
con
mi
mujer.
A
partir
de
que
empecé
solo,
después
de
un
par
de
años
hubo
un
par
de
tropiezos
por
las
inclemencias
económicas
que
tiene
este
país
y
me
vi
necesitado
a
recurrir
a
un
dinero
para
poder
solucionar
unos
problemas.
Y
es
ahí
que
conozco
al
señor
Jorge
Saieg,
que
me
otorga
por
primera
vez
por
el
año
2016
una
serie
de
créditos
como
para
que
yo
pudiera
solventar
mi
problema
en
un
momento
que
yo
estaba
desahuciado.
A
partir
de
ahí
quedé
manipulado,
extorsionado
y
sumiso
a
las
decisiones
crediticias
de
él
y
de
la
usura
que
practica.
A
partir
de
ahí
mi
vida
fue
cambiando,
perdí
mi
libertad
de
elección,
perdí
mi
libertad
financiera
y
quedé
encajado
en
un
sistema
de
manipulación,
extorsión
y
amenaza
que
llevaba
a
que
permanentemente
estaba
obligado
a
tomar
más
crédito
para
pagar
las
deudas
que
no
podía
pagar.
-¿Qué
se
plantea
en
la
denuncia?
-En
la
denuncia
está
muy
claro
el
esquema
de
cómo
eran
los
créditos,
cómo
eran
las
formas,
las
tasas
usureras
en
dólares
y
que
eran
todos
créditos
de
pago
diario.
Eso
fue
llevándome
a
que
yo
me
desarrollaba
comercialmente,
emprendía
negocios
que
eran
exitosos,
como
en
su
momento
lo
fue
Rock
Me
Beer
en
la
galería
Argeo,
después
Rock
Me
Beer
en
la
galería
Strada
y
Moto
Café.
Entonces,
mi
crecimiento
comercial
se
debía
al
éxito
de
los
negocios
que
yo
tenía,
la
gente
los
aceptaba,
le
poníamos
mucha
garra
con
todo
el
equipo
de
gente
que
tengo
y
no
es
algo
que
es
un
mérito
propio
mío.
Pero
el
nivel
de
intereses
que
pagaba
era
prácticamente
imposible
de
sostener
si
no
era
pidiendo
nuevos
créditos
y
agigantando
la
deuda.
-Decís
que
esto
empieza
en
2016
¿los
intereses
se
fueron
incrementando
después
o
no
estaban
claros?
-Fueron
los
primeros
6
meses
con
intereses
altos,
pero
no
del
nivel
que
terminamos
al
final,
cuando
ya
más
o
menos
me
tenía
cautivo
y
sabía
que
yo
podía
tener
el
perfil
para
poder
seguir
inyectándome
dinero
a
partir
créditos
usuarios
para
que
yo
pudiera
producir
que
con
lo
producido
yo
pudiera
pagar
esos
créditos
usuarios
y
si
no
los
podía
y
si
no
los
podía
pagar,
generar
nuevos
créditos
que
se
hacían
una
bola
totalmente
impagable
dentro
de
la
usura
que
había.
–
¿Y
cómo
terminó
ese
mecanismo?
-En
el
medio
no
es
que
terminó,
en
el
medio
circuló
fueron
muchos
años.
En
el
2018
se
apoderan
a
un
precio
vil
de
una
casa
que
yo
tenía
en
calle
Castelli
que
tenía
un
valor
de
mercado
de
$250,000
y
se
la
quedan
con
$100,000.
Traen
un
escribano
de
Córdoba
y
ese
escribano
de
Córdoba
que
no
tenía
jurisdicción
en
Villa
Carlos
Paz,
hace
una
escritura
en
el
living
de
la
casa
de
ellos
y
le
pone
la
casa
a
nombre
a
los
tres
hijos
de
él.
“Yo
te
la
tomo
por
100,
sí
o
sí.”
Y
si
no
te
gusta,
tráeme
la
plata
que
me
debés
ahora.
Yasí
era
como
yo
tenía
que
ir
accediendo
a
la
manipulación,
a
la
extorsión,
a
la
sumisión
de
hacer
lo
que
él
se
le
ocurría.
Llegaba
un
momento
en
que
vos
no
sabías
cuánto
debías,
qué
debías,
qué
habías
firmado
y
se
firmaban
documentos
en
blanco.
-¿Y
por
qué
no
paraste
antes
ese
mecanismo?
–
Por
miedo,
por
miedo.
Siempre
fue
eso;
si
no
paré,
fue
por
miedo,
por
miedo
a
su
trayectoria.
Hay
que
recordar
que
en
1998
él
tiene
una
causa
por
los
mismos
por
los
mismos
casos
que
estamos
hablando
ahora,
o
sea,
era
el
mismo
ardid,
el
mismo
modus
operandi
y
lo
mismo.
Es
una
manipulación
y
es
una
extorsión
lisa
y
llana,
nada
más.
Tiene
un
muy
buen
libreto
de
40
años
de
la
misma
manera.
Una
seguidilla
de
créditos
Tondo
relató
también
que,
tras
la
muerte
de
su
padre,
en
2020,
fue
víctima
del
mismo
proceso
de
enajenación
de
un
complejo
de
departamentos
que
heredó.
Según
lo
que
relató,
el
complejo
tenía
un
valor
de
550
mil
dólares
y
se
lo
reconocieron
a
150
mil
dólares
como
parte
de
pago
de
los
intereses
de
la
deuda.
En
otro
orden,
Tondo
remarcó
que
la
tasa
de
interés
que
se
le
aplicó
llegó
a
ser
superior
al
200
por
ciento
anual.
“Entonces,
vos
me
vas
a
decir:
si
sabías
todo
esto
que
sabés
ahora,
¿por
qué
no
lo
paraste?
Sinceramente,
cuando
te
has
metido
en
el
medio
esto
de
la
manipulación,
no
se
puede
parar
y,
además,
no
se
lo
pude
contar
a
nadie,
reconozco
que
esto
yo
no
se
lo
pude
contar
a
nadie”,
enfatizó.
A
su
vez,
apuntó
que
cuando
se
lo
pudo
explicar
a
sus
abogados,
éstos
le
advirtieron
que
por
la
manera
en
que
se
montó
la
operación,
los
créditos
eran
imposibles
de
pagar.
La
denuncia
En
otro
momento
de
la
entrevista,
Ariel
Tondo
advirtió
qué
lo
llevó
a
detener
todo
y
hacer
la
denuncia
que
se
presentó
ante
la
Fiscalía
de
Delitos
Complejos
de
Córdoba.
“A
mí
me
hace
quebrar
todas
mis
empresas
juntas
y
ahora
llegamos
al
momento
en
que
realmente
decido
y
no
tengo
otra
posibilidad
que
cesar
los
pagos;
afrontar
las
consecuencias
que
sean
y
denunciar
esto
a
la
Justicia
para
que
el
fiscal
de
Delitos
Complejos
entienda
cómo
es
el
modus
operandi
éste
y
que
determine
quién
tiene
la
culpa
cómo
fue
que
pasó”,
indicó
Tondo.
-¿No
se
encontró
otra
salida?
-No
tenía
otra
solución.
Mi
solución
era
esa.
Recurrir
a
la
justicia,
lo
que
pasa
que
tendría
que
haber
recurrido
mucho
tiempo
antes
y
no
haber
dejado
que
pase
esto.
-¿Hubo
un
momento
en
que
no
te
pidieron
más
que
pagues?
-No
nos
hablamos
más
porque
yo
le
mandé
un
requerimiento
para
que
se
abstengan
de
hablar
conmigo,
pero
sí
sé
que
hay
una
mano
de
obra
de
parte
de
él
que
generó
toda
esta
mala
información
que
hay
que
me
defenestra
a
mí,
a
mi
familia,
a
mis
hijos
que
estamos
todos
muy
angustiados.
Pero
sabemos
que
la
mano
de
obra
viene
por
el
lado
de
él
sabiendo
de
que
yo
le
iba
a
hacer
una
denuncia.

habló
de
todo
lo
que
está
sucediendo
con
sus
negocios.
“No
estoy
escondido”
En
otro
tramo
de
la
entrevista,
Tondo
remarcó
que
hay
muchas
versiones
que
señalan
que
su
familia
está
fuera
del
país
y
que
él
tampoco
está
en
Carlos
Paz.
“Ni
mis
hijos
se
fueron
a
Estados
Unidos,
ni
yo
estoy
escondido
en
Paraguay,
ni
estoy
escondido
en
Brasil
ni
me
fui
a
ningún
lado.
Yo
estuve
dando
la
cara
en
todos
lados
con
toda
la
gente
a
la
que
también
se
ve
perjudicada”,
dijo.
Y
agregó:
“Ariel
Tondo
es
la
misma
persona
que
durante
40
años
tuvo
un
desarrollo
comercial
económico
en
Villa
Carlos
Paz,
dándole
trabajo
a
más
de
200
personas,
pagando
200
sueldos
y
nunca
tuve
una
mancha
en
mi
trayectoria
comercial,
¿cómo
puede
ser
que
en
un
mes
quiebro
y
desaparezco
y
produzco
un
montón
de
daño
y
me
mando
a
mudar?
O
sea,
¿quién
que
hace
una
estafa,
queda
quebrado
y
se
queda
en
la
ciudad?
O
sea,
si
realmente
esto
hubiera
sido
una
maniobra
para
apoderarme
del
dinero
de
alguien,
me
hubiera
desaparecido
de
Villa
Carlos
Páez
y
no
hubiera
vuelto
más,
pero
estoy
en
la
ciudad,
con
todas
mis
cuentas
corrientes
quebradas,
todos
los
cheques
rechazados.
Tengo
atraso
en
los
pagos
de
sueldo
de
los
empleados”.
-¿Cómo
se
llegó
a
esto?
-Todo
eso
sucedió
porque
por
parte
de
él
porque
en
el
mes
de
diciembre
y
en
el
mes
de
enero
debe
haber
él
tomado
una
decisión
de
un
plan
retirada.
Cuando
te
digo
un
plan
retirada
es,
bueno,
decir:
“hasta
acá
llegamos,
le
vamos
a
sacar
toda
la
plata
que
sea
posible
hasta
que
se
seque”.
Y
me
sequé.
Y
cuando
me
sequé,
arrastré
a
otra
gente.
Es
muy
importante
que
la
gente,
antes
sacar
conclusiones
y
no
quiero
ni
que
esté
a
favor
mío
ni
a
favor
del
otro,
simplemente
que
lea
la
denuncia
y
vea
la
narración
de
los
hechos
según
como
lo
planteo.
Después
la
gente
creerá
en
mí
o
no,
pero
es
la
narración
de
lo
que
sucedió,
de
lo
cual
tengo
prueba
de
lo
que
estoy
diciendo.
No
es
que
tienen
que
creer
en
mi
palabra,
que
yo
sé
que
hoy
para
la
gente
de
Carlos
Paz
y
mucha
gente
de
Carlos
Paz,
mi
palabra
vale
menos
que
la
moneda
digital
Libra
de
Milei.
-¿Pensás
que
habrá
una
recuperación
de
tus
negocios?
-Hoy
estoy
en
esta
situación,
pero
voy
a
hacer
que
la
justicia
reivindique
eso
y
que
después
vuelva
de
vuelta
a
ser
el
empresario
que
yo
nunca
dejé
de
ser.
Yo
estoy
sólido
ahora,
pero
pasé
por
un
momento
muy
feo
hace
un
tiempo
atrás
cuando
me
deprimí
muchísimo
y
quería
tomar
una
decisión
extrema
para
para
salir
de
esto.
Después
dije:
“No
puedo
hacer
esto
si
yo
en
realidad
tengo
que
cuidar
de
mi
familia.”
Entonces,
me
repuse,
me
rearmé
y
ahora
estoy
preparado
para
bancarme
esto,
porque
yo
sé
que
van
a
ser
seguir
los
problemas,
¿entendés?
Yo
sé
que
a
quien
estoy
denunciando
no
es
un
pez
fácil,
porque
es
una
persona
que
tiene
poder
económico
para
hacer
lo
que
quiera.
Tiene
poder
económico
para
comprar
la
prensa
que
quiera
para
hacer
lo
que
se
le
antoje.
Entonces,
yo
también
tengo
que
entender
que
la
lucha
que
me
viene
enfrente
de
él,
pero
yo
pongo
y
responsabilizo
a
él
de
cualquier
daño
que
yo
sufra
o
que
sufran
mi
hija,
mi
mujer
o
mi
hijo.
O
que
sufran
mis
locales.
-¿Por
qué
si
vos
tenías
esa
fábula
que
señalás
de
los
años
80
y
90,
te
metiste
en
esa
persona?
-Porque
cuando
yo
en
ese
momento
yo
estaba
desahuciado
y
estaba
realmente
complicado
económicamente
esta
fue
la
única
solución
que
encontré
para
poder
seguir
adelante
con
mis
con
mis
negocios.
Entonces,
yo
no
sabía
fehacientemente
cómo
era
porque
yo
en
el
año
80
era
un
chico,
tenía
14
años.
Después
de
los
antecedentes
de
1997
cuando
él
tiene
antecedentes
penales
por
una
causa
de
asociación
ilícita,
por
extorsión,
eh
amenaza,
expropiación
de
bienes.
O
sea,
mismo
modo
operandi
de
lo
que
está
pasando
ahora.
Entonces,
estamos
hablando
del
mismo
personaje
que
es
proclive
a
cometer
el
mismo
delito.
Sabía
que
era
un
prestamista
de
de
Carlos
Paz
y
parecía
muy
amable
pero
después
empezó
a
hacerse
una
prisión
financiera
de
lo
cual
no
había
libertad
ni
forma
de
salir.
-¿Hubo
pagos
que
superaron
los
créditos?
-Hice
pagos
que
superan
las
acreencias
usureras
que
él
decía
tener
y
yo
pagué
de
más.
Cuando
llegué
a
diciembre
del
2024,
a
pesar
de
que
eran
a
acreencias
usureras
terribles,
yo
había
terminado
de
pagar.
Y
así
y
todo
siguieron
cobrando
y
siguieron
viniendo
a
cobrar
bajo
sumisión,
bajo
manipulación:
me
tenés
que
pagar,
me
tenés
que
pagar,
me
tenés
que
pagar,
me
tenés
que
pagar,
me
tenés
que
pagar.
Hasta
que
me
sequé.
Y
cuando
me
sequé
ya
era
tarde.
Ya
era
tarde
porque
después
vino
la
bola,
vino
la
bola
de
los
cheques.

empresario
Ariel
Tondo
acusó
al
prestamista
Jorge
Saieg
de
secarlo
de
fondos.
-¿Era
crédito
para
pagar
crédito?
-Sí,
era
crédito
para
pagar
crédito
que
era
tasa
sobre
tasa,
porque
me
decía:
“Bueno,
arranquemos
de
cero.”
Entonces,
el
crédito
anterior
que
ya
tenía
tasa
usuraria
más
un
nuevo
crédito
con
tasa
usuraria,
que
lo
refinanciamos
a
un
año.
Lo
que
era
700
000
se
hacían
3
millones
de
dólares.
Eso
fue
pasando
hasta
el
22
de
febrero
cuando
mi
giro
comercial
de
los
locales,
ya
no
daba
para
poder
hacer
frente
a
los
pagos
que
yo
le
hacía
a
esta
persona.
Entonces,
que
yo
empecé
a
tomar
plata
de
la
gente
que
confiaba
en
mí,
que
me
decía,
“Ariel,
tengo
esta
plata
y
te
la
dejo
a
vos
para
que
la
manejés.
No
hay
problema,
confío
en
vos”.
Y
yo
tomaba
ese
dinero
que
era
a
una
tasa
muy
normal
del
2%
para
poder
pagar
estas
tasas
usuradas
del
20
y
el
25%
mensual.
Entonces,
no
había
forma
que
con
mi
giro
comercial
o
con
mi
ganancia
de
mis
locales
yo
pudiera
pagar
esto.
Entonces,
fui
accediendo
a
préstamos
de
terceros
para
poder
hacer
frente
a
estas
cuotas.
Cuando
él
me
hace
el
plan
retirada,
llega
con
algún
tipo
de
ardid,
ya
que
tenía
alguna
información
privilegiada
de
mis
finanzas.
Entonces,
entre
diciembre
del
2024
y
enero
del
y
febrero
del
2025,
él
me
desapoderó
de
1.567.000
de
dólares
con
pagos
diarios.
-¿Qué
le
decís
a
la
gente
que
depositó
su
confianza
en
vos?
-Cuando
me
pueda
recomponer
de
esto
que
quiero
que
sea
en
el
menor
tiempo
posible,
voy
a
ir
solucionando
todo
y
hasta
el
último
peso
de
todas
las
personas
que
pudieron
haber
sido
perjudicadas
por
este
tipo
ardid
que
se
dio
por
parte
de
Jorge
Saieg.
Yo
sé
que
he
perjudicado
a
algunas
personas
que
le
he
tomado
dinero
en
forma
personal,
pero
a
un
a
un
interés
muy
lógico
y
muy
parecido
al
del
banco
y
también
se
pudieron
haber
perjudicado
algunas
personas
de
Moto
Café
que
compraron
su
moto
y
no
se
les
pudo
entregar
en
el
mismo
día
o
en
el
mismo
plazo
porque
también
se
vinieron
para
atrás
los
cheques
que
habían
sido
dados
para
comprar
estas
motos
y
como
los
cheques
vinieron
rechazados,
no
se
le
puede
no
nos
pueden
entregar
la
documentación
y
ahí
tenemos
una
traba
con
la
documentación.