Mientras
su
hermana
mayor,
la
princesa
Amalia,
se
prepara
para
asumir
su
futuro
rol
como
reina
de
los
Países
Bajos,
Alexia,
la
segunda
hija
de
los
reyes
Guillermo
y
Máxima,
parece
decidida
a
llevar
su
vida completamente
distinta.
Con
solo
19
años,
la
joven
royal
se
ganó
el
apodo
de
“la
princesa
rebelde”,
no
solo
por
su
actitud
despreocupada,
sino
también
por
sus
elecciones
personales,
su
amor
por
las
artes
y
su
postura
frente
a
las
estrictas
normas
de
la
realeza.
Desde
su
infancia,
Alexia
mostró
un
marcado
interés
por
disciplinas
artísticas
como
el
ballet,
el
piano
y
el
canto.
Si
bien
nació
dentro
de
una
de
las
casas
reales
más
tradicionales
de
Europa,
su
pasión
parece
apuntar
más
hacia
los
escenarios,
aunque
su
camino
educativo
está
completamente
alejado
de
eso.
A
diferencia
de
Amalia,
quien
ya
asumió
un
rol
institucional
y
forma
parte
del
Consejo
de
Estado
del
reino,
Alexia
no
ocupará
cargos
oficiales
ni
recibirá
un
salario
estatal
al
alcanzar
la
mayoría
de
edad.
Esto
no
solo
responde
a
una
elección
personal,
sino
también
al
marco
institucional
de
la
monarquía
holandesa,
que
limita
los
roles
oficiales
a
tres
miembros
de
la
familia:
el
rey,
su
heredero
y
su
predecesor.
Por
eso,
al
igual
que
su
hermana
menor,
Ariane,
Alexia
deberá
tener
su
propio
destino
profesional
lejos
del
financiamiento
público.
La
princesa
Alexia
mantiene
una
postura “libre”
Algo
que
distingue
a
Alexia
de
sus
pares
reales
es
su
carácter
libre
y
una
fuerte
inclinación
a
vivir
sin
tantas
restricciones.
Sin
embargo,
este
estilo
de
vida
relajado
y
juvenil
la
puso
varias
veces
en
el
foco
de
la
prensa.
Videos
virales
en
TikTok,
donde
se
la
ve
cantando
canciones
con
letras
polémicas,
y
fotos
filtradas
de
alguna
que
otra
fiesta,
alimentaron
el
mito
de
que
no
le
tiene
miedo
a
romper
las
reglas.
Lejos
de
escándalos
grandes,
Alexia
simplemente
parece
ser
una
adolescente
atravesando
una
juventud
con
exposición
pública,
pero
con
intereses
genuinos
y
una
actitud
algo
más
relajada
frente
a
las
exigencias
del
protocolo
real.
En
un
contexto
donde
las
monarquías
modernas
buscan
reinventarse,
figuras
como
Alexia
representan
una
nueva
generación
que
se
atreve
a
salir
del
molde
sin
perder
el
lazo
con
su
familia
y
sus
compromisos.
Su
camino
aún
es
incierto,
pero
todo
indica
que
estará
marcado
por
el
arte,
la
expresión
personal
y
un
modo
distinto
de
representar
a
la
realeza.
VO